Anteriormente, los seguros de gastos médicos parecían ser un recurso al que sólo podían acceder aquellos que trabajaban en grandes empresas o instituciones gubernamentales, dejando completamente desprotegido a la mayoría del porcentaje poblacional que se dedicaba a laborar en el mercado informal. Esta situación, aunada a los bajos salarios obtenidos por estos trabajadores, motivó la creación de distintos modelos de financiamiento que permitieran tener un acceso a estos servicios, desde instituciones privadas hasta gubernamentales. Así, se ha ampliado considerablemente el espectro de posibilidades que existen para tener un respaldo médico gracias a nuestro trabajo.
En el artículo del día de hoy, vamos a hablar de un sector creciente en los últimos años en nuestro país y que se ha convertido en uno de los grupos laborales más interesados en este tipo de servicios, pues forman parte fundamental de su coexistencia y de su forma de trabajo: el freelance. Este modelo se diferencia de otros por la total autonomía que brinda al profesional, pues en lugar de trabajar de tiempo completo para una empresa, él es su propio jefe y tiene la capacidad de involucrarse laboralmente en varios proyectos. Entonces, más que un empleado se convierte en un prestador de servicios.
Otro de los beneficios que ofrece este modelo de trabajo es la capacidad de establecer un precio más justo por su trabajo, pues ellos se encargan de establecer la tarifa de pago por sus servicios, en lugar de adaptarse a un modelo injusto de remuneración. Muchos freelance aseguran que al trabajar en diversos proyectos se sienten más a gusto con su vida profesional, pues en cada proyecto tienen la oportunidad de trabajar con distintas herramientas, sectores o simplemente con distintas personas, lo que motiva su creatividad considerablemente.
Sin embargo, a pesar de la popularidad y el gran número de empresas que optan por contratar a estos profesionales bajo esta modalidad, ciertamente mantienen una lucha continua para contar con todas las prestaciones que un trabajador común y corriente mantiene al ser contratado, uno de ellos, es justamente la obtención de seguros de gastos médicos, un terreno sumamente complicado para los freelance.
Aquellos profesionales con largo tiempo trabajando bajo este formato, saben que al momento de extender una cotización a un cliente potencial, hay otros gastos a considerar dentro del precio final más allá del simple costo del servicio otorgado, uno de ellos considera un porcentaje del pago como una reserva para el profesional y que será usado al momento de padecer una enfermedad y poder recibir la asistencia médica necesaria.
Sin embargo, esto sigue limitando al profesional, pues si en algún momento la cantidad de trabajo disminuye, no podrá contar con esa reserva al momento de enfermarse y tendrá que tomar dinero de otra parte o destinar dinero de un monto reservado para otro asunto, desbalanceando por completo la economía del freelance.
Como nunca sabemos con certeza, cuándo vamos a enfermarnos, lo mejor para los freelance es encontrar sistemas de aseguramiento constante, en donde no importe la temporada del año o si es una época de mucho o poco trabajo, en cuanto el freelance necesite de visitar a un doctor, pueda hacerlo a través de su seguro médico propio.
Y es que el freelance tiene que hacer una evaluación honesta pero al mismo tiempo rentable de sus capacidades, pues la autonomía de trabajo también le otorga una autonomía de gastos empresariales, es decir, todos aquellos costos o recursos que en un momento eran proveídos por la empresa, ahora corren por su cuenta.
Es decir, si tu equipo se descompone, tú tendrás que pagar al técnico, o sí te enfermas y no puedes trabajar, no sólo pagarás el salario de tu médico, sino, también un día sin trabajo se convierte en un día en el que no estás ganando dinero. Pero pensemos, ¿qué tal si el padecimiento es grave? Probablemente tengas que pasar varios días en reposo y aunque tu cliente puede esperar un par de días, no está obligado a dejar de exigir el trabajo en la fecha pactada, sobre todo si ya ha pagado la totalidad o un porcentaje del servicio. De cierta manera, ahora no sólo gastaste una cantidad considerable en atención médica y no vas percibir tu sueldo del día, sino que el cliente puede quedarse con una mala impresión de tu persona.
Para poder prevenir este tipo de problemáticas y continuar con este modelo de trabajo, los freelance experimentados recomiendan tomar en cuenta desde el principio, un ahorro para poder llevar a cabo la contratación de un seguro y así, ellos se harán cargo de tus gastos médicos. Para que esto pueda funcionar realmente, va a ser necesario añadir un porcentaje para seguros de gastos médicos en el costo total de tu servicio y ponerlo claramente en la cotización para el cliente.
El segundo consejo es formar una red de trabajo, así, si tienes una convalecencia larga, un colaborador con las mismas habilidades puede “entrar al quite” y de esa manera, el cliente obtiene el trabajo contratado y te brindará su confianza para otros proyectos, pues sabe que contigo no habrá fallas ni informalidades.
En Seguros HCID ofrecemos seguros de gastos médicos no sólo para los profesionales freelance sino también para todos aquellos trabajadores que no cuentan con afiliación en el IMSS, ISSSTE o Seguro Popular, pues trabajamos con las mejores empresas de este ramo, como AXA, MAPFRE y GNP seguros. Dentro de las diversas modalidades se pueden considerar enfermedades menores hasta hospitalizaciones por padecimientos más complejos.
Si estás considerando iniciar tu carrera como freelance pero sientes temor por las prestaciones que no forman parte de este modelo de trabajo, no te preocupes más, en Seguros HCID te ofrecemos la protección necesaria, pues no sólo contamos con seguros médicos, sino también, de auto y de vida. Nunca es tarde para considerar este tipo de servicios.
Antes de despedirnos te invitamos a contactar a uno de nuestros asesores para conocer los beneficios específicos de nuestros servicios.
¡Estamos para cuidar de ti!!