Autocompara es un servicio virtual gestionado por Santander, cuyo fin es dar a conocer (impulsar la difusión y acceso) a distintas aseguradoras de automóviles en el país. La creación de una plataforma de este tipo representó una nueva opción para potenciar la búsqueda de aseguradoras, permitiendo analizar las ventajas y tarifas entre una compañía y otra.
Sin embargo, un servicio tan práctico tuvo como consecuencia que las distintas compañías empezaran a competir por brindar servicios y precios más atractivos a sus clientes. Lo cual significó también que en un tiempo breve la calidad en el trabajo y las tarifas ofrecidas por las aseguradoras acrecentaron como un efecto lógico en la carrera por tener el primer lugar del mercado.
Hay un factor importante que debe mencionarse. A pesar de la avanzada plataforma de Autocompara y de la exactitud que puede arrojar en sus cálculos para determinar la tarifa correspondiente, no siempre aparecerá como primera opción la aseguradora más barata. Decidir un precio alto o bajo en el mercado depende, en muchos casos, del número de vehículos que han sido asegurados.
Ésta es la principal razón por la que si requerimos los servicios de una aseguradora, la que en apariencia es la mejor opción al principio puede dejar de serlo después de haber buscado nuevas opciones. Los descuentos se determinan respecto al índice de ventas que haya registrado la aseguradora en cuestión.
Es importante tomar ciertas precauciones. Recordemos que la realización de trámites en el banco es un proceso frío, se trate del servicio que sea, por ejemplo, un depósito o la apertura de una cuenta nueva. Pensemos en cómo sucede la interacción cuando nos encontramos lejos de una sede física y realizamos los movimiento mediante una línea telefónica o de internet. Recordemos que en ambos casos hay un margen de impersonalidad que hace muy pobre la experiencia si la comparamos con la posibilidad de tratar de manera presencial con una persona y consultarle nuestras dudas.
Lo que estamos describiendo sucede con Autocompara, además de que por tener un papel un tanto externo en el proceso de compra y venta, dicha plataforma puede mantenerse al margen de reclamos bajo contextos muy específicos.
Al requerir el servicio de una aseguradora es esencial considerar o cerciorarse siempre de todo lo que se ofrece y las clausulas que se aplican. Buscar a un agente puede ser una opción buena, ya que es más probable que nos topemos con un trato no frío y sí, al contrario, con la posibilidad de contratar un servicio en el que la calidad humana esté implícita.
Digamos que, en el caso de ir directamente a un banco, nuestras necesidades y la atención que se merecen son sólo elementos dados ya por sentados, no determinantes, en su proceso de ganancia, mientras que para un agente la resolución de tus dudas, el tiempo que esto dure y la atención brindada a tus necesidades sí definirá el flujo de ingresos.
Para decirlo de una forma más clara, la frialdad, el trato impersonal y procesos que podrían asemejarse en mucho a los de la burocracia son muy remotos si hemos decidido acudir con un agente.
Otra de las desventajas de Autocompara es que su proceso de recontratación, una vez concluido el plazo determinado, resulta poco efectivo, además de que cuando se acerca dicha fecha, el momento en que concluirá tal contrato, no hay ninguna alerta o servicio que nos lo recuerde.
Es importante tener muy presente el punto anterior, ya que, planteando un escenario hipotético, si pasara el plazo definido para renovar o recontratar, y el cliente no fuera consciente, el vehículo simplemente estaría circulando allá afuera sin ningún tipo de seguro. Si el vehículo queda inservible o a merced de un par de composturas serias tras un accidente, por citar un ejemplo, no habrá ninguna base o protección económica que sirva como sostén.
El problema de Autocompara y diversas plataformas virtuales que te permiten contratar el servicio de una aseguradora es que muchos detalles pertinentes y muy importantes (clausulas) a primera vista no son mencionados o no se les da el peso merecido.
¿Imaginas lo engorroso que puede llegar a ser no poder saber con precisión o descubrir de una forma un poco velada los detalles de una cotización? Saber, por ejemplo, cuánto te corresponde pagar a ti y cuánto a la aseguradora en un accidente o si el contrato incluye algún tipo de cobertura médica son datos que deben subrayarse muy bien, en otras palabras, ser muy visibles y claros desde el principio que se ha hecho una relación entre el cliente y la aseguradora.
Por asombroso que suena muchísima gente confía de una forma casi ciega en las plataformas virtuales, cuando deberían realizar una elección tan importante después de un análisis meticuloso, conociendo a fondo cada clausula, excepción y a lo que se compromete o tiene derecho cada parte. El problema de realizar una decisión así, de forma ligera e impulsiva, es que las consecuencias se muestran hasta que pase una situación, lamentable la mayoría de las veces, en la que deba intervenir la aseguradora.
Un último consejo: además de calcular y analizar a fondo todas las posibilidades que tengamos a la mano (las especificaciones de cada una) es que si te sirves de una plataforma virtual para contratar alguna aseguradora y dicha opción resulta conveniente, no dudes en contratarla. Generalmente la experiencia directa de una persona o un experto de plena confianza son buenos testimonios que nos pueden orientar.
En HCid contamos con varios años de trayectoria, ofreciendo un servicio de primera calidad que nos respalda y da testimonio de nuestro profesionalismo. Acércate a nosotros y conócenos: somos una de las mejores aseguradoras que podrá encontrar en todo México.